¿Eres el auténtico “manitas” de tu casa? ¿Te gustaría darles una segunda vida a esos muebles viejos heredados? Si la respuesta a estas preguntas es afirmativa, este post es para ti.

La restauración de muebles es una afición que adquiere mucha gente a partir de la etapa sénior. Requiere tiempo, espacio físico y sobre todo, mucha paciencia y amor por lo que se hace.

Con apenas un puñado de consejos, serás capaz de restaurar muebles antiguos y darles un toque más moderno para ser compatibles con nuestro hogar. Si deseas saber más sobre este tema, solo tienes que seguir leyendo las próximas líneas.

Materiales y conocimientos básicos que necesitas

Aquel armario ropero que heredaste de tus padres, o ese tocador que encontraste en un mercadillo de antigüedades pueden convertirse en verdaderas joyas para tu hogar con una restauración adecuada.

Según recomiendan los maestros restauradores, lo más importante antes de ponerse manos a la obra es revisar el mueble y evaluar si merece la pena restaurarlo: muchos muebles antiguos están demasiado estropeados o puede que carezcan de valor.

Es también importante conocer el material con el que está hecho el mueble a restaurar: no es lo mismo que sea de madera maciza que de contrachapado. Si los muebles son de madera maciza, con una reparación adecuada pueden durar realmente siglos.

Entre los materiales que vas a necesitar, se encuentran:

• Cinta métrica
• Sierra manual o eléctrica.
• Espátula.
• Barniz
• Lija
• Cepillo metálico
• Masilla

Las claves de la restauración paso a paso

Si finalmente nos decidimos por la restauración, existen una serie de pasos comunes a todos los muebles, aunque cada uno tendrá luego sus particularidades. Entre estas, destacan:

1. Limpieza y retirada del barniz

Los muebles antiguos suelen estar sucios y llenos de polvo. Para limpiarlos, bastará con utilizar un cepillo y jabón neutro. Una vez limpios es hora de retirar el barniz que los cubre, normalmente descascarillado por el paso de los años. Para ello, una buena idea es aplicar un producto decapante y luego retirarlo con ayuda de una lija o espátula. Una vez finalizado este paso tendremos el mueble listo para la restauración final.

2. ¡Ojo con la carcoma! Cómo retirarla

La carcoma es un mal muy común en todo mueble viejo. Se trata de pequeñas larvas de coleópteros que agujerean la madera antigua. Podemos detectarla si observamos pequeños agujeros en la madera.

Para desinfectar un mueble carcomido, conviene aplicar un producto anti-carcoma en los agujeros que veamos, y dejar el mueble tapado con plásticos durante al menos un par de días.

3. Reparar golpes y arañazos

Debido al paso de los años, es muy normal que los muebles antiguos tengan arañazos o golpes. Es muy sencillo repararlos con la ayuda de masilla o cera natural: aplícala a la hendidura, líjala con una espátula y el arañazo quedará completamente disimulado.

4. Tiradores y elementos de metal: apuesta por el color

Es importante limpiar los tiradores y otros elementos de metal que tengan nuestro mueble. Esto lo podemos hacer con ayuda de un cepillo metálico sumergido en vinagre.

Si los tiradores están muy estropeados o no nos gusta cómo quedan, una gran manera de darle un toque moderno y divertido a un mueble antiguo es cambiar los tiradores. Imagina una vieja cómoda con elementos coloridos o con motivos florales: ¡puede quedar muy bien!

Si nuestro mueble tiene bisagras rotas o desencajadas, resulta una buena idea comprar materiales nuevos para asegurarnos de que las puertas de nuestros muebles se abren de manera adecuada.

5. Barnizado y encerado

Una vez hemos reparado todos los pequeños desperfectos de nuestro mueble, es importante darle el toque final. Para barnizarlo, aplica una capa de producto con una brocha y espera 24 horas. Después, deberás lijarlo y aplicar todas las capas de barniz que consideres necesarias hasta que te guste el acabado, aunque con una suele ser suficiente.

Si queremos, podemos aplicar también una capa de cera natural para que tenga un tono natural.

6. Dale un toque de color: pintar muebles antiguos

Lo más habitual es que las personas que restauran muebles los dejen con una capa de barniz del color de la madera. No obstante, debemos saber que podemos darle un toque moderno a nuestros muebles si los pintamos de un color diferente. Sin pasarnos con la cantidad de pintura, podemos pintar nuestros muebles de algún color que combine con las paredes de nuestra casa. ¡Atrévete a innovar!

Como podemos ver, existen numerosas maneras de darle una segunda vida a nuestros muebles antiguos. Con un poco de paciencia y los materiales adecuados podemos darle un toque moderno a cómodas, armarios, escritorios antiguos y un sinfín de muebles.

Además, restaurar muebles antiguos supone una manera de realizar un consumo responsable de bienes y de reciclar objetos. Por último, has de saber que la actividad de restauración es realmente adictiva: cuando arreglas tu primer mueble, no podrás parar. Así pues, atrévete con estos sencillos pasos que te hemos dado.

Si además de la restauración, eres un aficionado a las manualidades, en este otro post te damos ideas para que redecores tu casa con tus propias manualidades?. Una forma barata y entretenida de decorar tu casa.

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