La superficie de bosques ocupa el 31% del planeta. En total, 4.000 millones de hectáreas.
Aunque en los últimos años desaparecen unas 7,3 millones de hectáreas anuales.
Los bosques concentran más de la mitad de la biodiversidad del planeta. En concreto, un 80% de la biodiversidad terrestre, aunque se calcula que la deforestación de los bosques tropicales origina la extinción de hasta 100 especies diarias.
La causa abrumadora directa de la deforestación en el mundo es la agricultura.
La agricultura de subsistencia es responsable de 48% de la deforestación, la agricultura comercial es responsable de 32%, la tala es responsable del 14% y la madera que se usa como combustible constituye el 5% de la deforestación.
Según datos de la ONU, alrededor de 1.600 millones de personas dependen de los bosques para vivir, ya que estos desempeñan un papel fundamental en la vida de las comunidades rurales suministrando, entre otros recursos, madera, alimentos, forraje y medicinas.
Contribuyen a mitigar el cambio climático ya que almacenan carbono, protegen el suelo de la erosión y ayudan a conservar los recursos hídricos.
Los bosques y praderas submarinas pasan más desapercibidos que los terrestres, aunque son ocho veces más productivos que los bosques tropicales.
Sin embargo, la pesca agresiva, la contaminación y las especies invasoras hacen que desaparezcan miles de hectáreas.