La relación entre abuelos y nietos es uno de los pilares de las familias modernas. En un mundo en el que los padres dedican demasiadas horas a trabajar, los abuelos se convierten a menudo en el recurso más fiable para cuidar a sus propios nietos. Llevar y traerlos del colegio, preparar comidas o jugar con ellos se ha convertido en parte de la rutina de numerosos séniors.

Lo cierto es que cuidar a los nietos no solo beneficia a los más pequeños: según numerosos estudios, atender a nuestra prole tiene numerosos beneficios para los cuidadores, mejorando la salud cognitiva y física de los abuelos y abuelas a la par que mejora su longevidad.

En este post enumeraremos algunos de los beneficios de cuidar a nuestros nietos, así como algunos consejos hay que tener en cuenta a la hora de pasar tiempo con los más pequeños de la familia. Si deseas saber más solo tienes que seguir leyendo.

El cuidado de los nietos es una relación en doble sentido

Las exigencias de un mercado laboral que absorbe demasiado tiempo hacen que los padres no puedan dedicar todo el tiempo que desean a sus hijos. Esto hace que si los abuelos viven cerca y gozan de buena salud se convierten en la principal opción para complementar el cuidado de los hijos.

Según una encuesta de la Fundación Mémora el 73% de los encuestados afirmaba que cuidaba de sus nietos, siendo sus principales roles llevarlos y recogerlos del colegio (27%) y darles de comer o de cenar (24%) cuando los padres están trabajando. En concreto, un 23,5% estaría con ellos cada día, un 39% varios días a la semana, el 17% solo un día y otro 17% de forma esporádica.

Pasar tiempo con niños conlleva paciencia y responsabilidades, pero la mayoría de abuelos y abuelas reconocen sentirse mejor cuando pasan tiempo con sus nietos. Estas sensaciones no solo son tal cosa, sino que vienen respaldadas por la ciencia.

Según un estudio publicado en 2017 por la revista Evolution and Human Behavior reveló que los abuelos que cuidan de sus nietos de forma ocasional muestran una esperanza de vida de hasta cinco años más que los que no lo hacen.

Los beneficios de pasar tiempo con nuestros nietos son evidentes y podemos citar algunos de ellos:

Aumentan la autoestima y la sensación de productividad

Al convertirnos en protagonistas del cuidado de nuestros nietos, de pronto adoptamos una serie de responsabilidades y una misión. Esta misión puede ayudarnos a encontrar un sentido a nuestra vida, justo en el momento en el que no tenemos obligaciones laborales.

El hecho de sentirnos responsables del cuidado de nuestros nietos otorga dirección y estructura a nuestra vida, lo cual mejora de manera clave nuestra imagen de nosotros mismos. Tomar un rol de cuidador dentro de nuestra familia aumentará nuestra autoestima y la sensación de que somos útiles a nuestros seres queridos.

Mejora nuestra salud cognigitiva

Aunque la brecha generacional puede ser grande con nuestros nietos, tenemos mucho que aprender de su manera de ver el mundo. El siglo XXI nos ha traído todo tipo de tecnologías y realidades sociales que nuestros nietos pueden utilizar de manera casi instintiva. Pasar tiempo con ellos nos puede ayudar a comprender de mejor manera el mundo de hoy en día, familiarizarnos con el uso de Internet y de las Tecnologías de la Información.

Mejoramos nuestra actividad física

¿Qué mejor excusa para tener una vida activa que cuidar de un niño o niña? Los más pequeños de la casa están llenos de energía, por lo que pasar tiempo con ellos es la manera perfecta de hacer más ejercicio. Ir de paseo juntos, acompañarlos al parque o compartir juegos no solo estrechará nuestro vínculo, sino que mejorará de manera notable nuestra salud física y mental.

Salimos de la rutina y mejoramos nuestro estado de ánimo

Cuando nosotros, como abuelos, pasamos tiempo junto a nuestros nietos, nos beneficiamos de nuevas experiencias que aportan una nota de color y novedad a nuestra rutina diaria. Cuidar de nuestros nietos implica salir de nuestra zona de confort, nos ayuda a sumergirnos en las realidades de una generación diferente.

Así pues, compartir momentos con nuestros nietos puede ayudarnos a salir de la monotonía, pues es indudable que la energía y vitalidad de los más pequeños nos activa y aporta cosas nuevas a nuestra rutina.

Refuerza los lazos familiares

Al cuidar a nuestros nietos reforzaremos de manera inherente la relación con nuestros hijos. Cultivar una relación sana con nuestros hijos pasa por establecer vínculos entre todos los miembros de la familia. Así pues, si somos el cuidador principal de nuestros nietos, nuestros hijos estarán más contentos de pasar más tiempo con nosotros, mejorando nuestros lazos afectivos.

Ojo con abusar del cuidado: recomendaciones para abuelas y abuelos

Si bien cuidar de nuestros nietos aporta todos los beneficios que hemos enumerado, hemos de saber que no todo es positivo y que si no establecemos límites puede llegar a ser un problema. Si las responsabilidades asumidas por los abuelos son excesivas, las ventajas de cuidar a los nietos pueden convertirse en inconvenientes: estrés, irritabilidad, empeoramiento de las condiciones físicas y deterioro de los lazos familiares.

Así pues, es muy importante establecer unos límites de las responsabilidades que tiene el abuelo como cuidador. Aunque haríamos cualquier cosa por nuestros hijos y nietos, es necesario tener nuestro propio espacio para decidir lo que deseamos hacer. Lo más relevante es poder cumplir con gusto con el cuidado de los más pequeños, sin que esto sea una pesada carga que no podamos o queramos afrontar

Encontrar el punto justo entre las necesidades de los padres y las capacidades y ganas de los abuelos para cuidar a los nietos son la manera ideal de evitar conflictos dentro de nuestra propia familia.

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